Según se desprende de los últimos datos facilitados por la Oficina Meteorológica del Reino Unido, el actual proceso de calentamiento de planeta parece haber entrado en un periodo de estancamiento para los próximos cinco años. Se trata de algo no observado antes. Se ha llegado a tal conclusión, después de revisar a la baja en algunas décimas el incremento de la temperatura promedio de aquí a 2017.
Así, si anteriormente, los estudios llevados a cabo establecían tal aumento en 0,54°C para la horquilla 2012-2016 con respecto al promedio del periodo 1971-2000, ahora se ha sabido que será de 0,43°C para el 2013-2017.
Resulta una cifra ligeramente más alta que los 0,40 °C de incremento obtenidos en 1998, el considerado año más cálido desde que la entidad británica ha estado llevando a cabo mediciones desde hace 160 años.
Esta observación ha sugerido que probablemente se esté entrando en un periodo de ralentización de la subida de las temperaturas, que por lo menos abarcará al próximo lustro. Una ruptura en el imparable calentamiento global. Uno de los factores que habrían entrado en juego para poder entender este inesperado proceso son las dinámicas oceánicas, aún poco comprendidas. Se trata de un área que se presenta desafiante para la investigación, ya que no existen observaciones a largo plazo del comportamiento de las corrientes oceánicas. No se conoce como han funcionado durante largas escalas de tiempo, aunque se sospecha que pueden tener un papel clave a la hora de determinar el comportamiento de las temperaturas a escala global.
Sin embargo, este estancamiento no quiere decir necesariamente que ésta vaya a ser la tendencia a seguir durante este siglo. Según aclara el Dr. Peter Slott, Jefe de Vigilancia Climática de la Oficina Meteorológica, “el patrón general de calentamiento no admite dudas”.
Para el científico, pese a que la última década ha pasado a la Historia como la más calurosa jamás registrada, “el ritmo del calentamiento en el mismo periodo ha disminuido en comparación con el rápido incremento observado durante los años 70. En esa década, el calentamiento fue más rápido”.
“La variabilidad en los patrones climáticos no es nada inusual. Puede haber periodo de poco o, incluso, nulo calentamiento”, matiza Slott. Este aspecto del comportamiento del clima choca con la concepción lineal que suele tener el público de la forma en que evoluciona cualquier proceso de la naturaleza. Sería algo así como un diente de sierra.
La aparente ralentización del calentamiento global podría ser un espejismo cuya peor consecuencia sería un relajamiento en las políticas necesarias para luchar contra el cambio climático. El Doctor Slott advierte que “el calentamiento global podría acelerarse de nuevo, en cualquier momento. Hay un incuestionable proceso en marcha de subida general de las temperaturas”.
Alfonso Ferrer
Periodista
Autor del blog Noticias desde Metrópolis
